Tomberlin ∷ “tap”

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Tomberlin, 2022. Fotografía: Michelle Yoon.
A Sarah Beth Tomberlin —Tomberlin a secas para, nosotros, sus seguidores— le ha bastado un largo ("At Weddings", 2018) y un extended ("Projections", uno de mis EPs favoritos del 2020) para hacerse de un creciente renombre entre la nueva generación de cantautores indie-folk. Su música es un corazón abierto, a veces desgarrado, que vierte puro sentimiento entre canciones de tonos silenciosos e íntimos que develan una constante exploración personal. Nacida en Florida y criada en la zona rural de Illinois, en el seno de un hogar religioso con un padre convertido en pastor, el periplo de vida de Tomberlin la condujo a Louisville, Kentucky, donde publicó su primer material online; ahí la ficharía Saddle Creek. Entre los reconocimientos de su debut y su subsecuente EP, le seguiría una mudanza a Los Angeles y ya tiempo después, tras los incendios forestales y en plena pandemia, terminaría de instalarse en un pequeño departamento de Nueva York, ciudad que ha terminado abrazando como hogar. Allí, puntualmente en Brooklyn, registró lo que ahora es "i don't know who needs to hear this...", su flamante segundo álbum.

Grabado en el transcurso de dos semanas, el disco contó con la participación de diversos músicos de estudio reclutados por el multiinstrumentista Phil Weinrobe, también co-productor del álbum. "Fue la mejor experiencia que he tenido, literalmente lloré al final", ha contado Tomberlin, agregando además que la temática de este largo "trata de examinar, mantener el espacio, y edificar un altar para los sentimientos". Al escuchar la placa, cobra total sentido su noción de espacio entre la quietud de instrumentaciones y voces sostenidas en su música, algo bastante meditativo ahí. Le encuentro sus buenos momentazos (maravillosa la apertura con "easy" o las 'eléctricas' "stoned" y "happy accident") pero hoy va el destaque a uno de sus singles principales: "tap", pista en donde le canta tanto a su cosmovisión de sentimientos, soledad y crítica a las redes sociales ("Toca ese corazón hasta que me odie, toca el cuadrado y reorganízame [...] hablar con extraños como si nos conociéramos") como a una típica caminata por su ahora adorada Nueva York ("amo a la gente tocando canciones en el parque [...] no soy un árbol, yo estoy en un bosque de edificios”) entre capas de percusiones y delicadas cuerdas de guitarras, teclados una-corda y bajo eléctrico. Hermoso track. Aquí el videoclip de "tap" que compila tomas de la grabación en los estudios Figure 8 de Brooklyn.

"i don't know who needs to hear this...", el espléndido nuevo álbum de Tomberlin ya está disponible vía Saddle Creek.